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Historia del Río Ozama: Puerta de San Diego próximo al Río Ozama (Capítulo XII)

 


Historia de la Puerta de San Diego

 

La puerta de San Diego, localizada próximo al Rio Ozama, en el entorno del palacio virreinal de Don Diego Colón, de donde deriva su nombre, fue construida en el siglo XVl (año 1549), en honor al virrey de Indias. Es la puerta principal de la villa

 

Fue construida por el maestro Rodrigo de Liendo.

 

La Puerta San Diego o Puerta de la Mar, fue la principal entrada a la ciudad de Santo Domingo desde el Puerto ubicado en el río Ozama.     


Tiene la característica de que el eje central está producido con un desvío angular opuesto al palacio. De esta manera, el edificio se podía proteger en caso de ataque del exterior.


De un lado de la puerta queda la famosa Plaza de España, dominado por el Alcázar. Del otro, la via  que circunvala el puerto. Justamente por allí se pueden encontrar las bases del antiguo muro de contención del río Ozama.

 

Escudos heráldicos



Este gran vano con su puerta monumental, cuenta con un enorme arquitrabe, en su cara exterior, el que proyecta el camino de ronda, en la parte superior.

 

En la parte frontal, ostenta cinco escudos heráldicos, siendo el mayor de todos el del centro.

 

Se trata del escudo de armas del Emperador Carlos V, con el águila bicéfala que soporta la corona imperial. En el centro, el escudo del reino de España y en la parte baja, sus garras sostienen el Toisón de oro.

 

El gran arquitrabe que está definido por un arrabá que apoya en dos columnas de capitel corintio, complicado, sostiene un apoyo superior decorado con mascarones.

 

En el norte del vano, se presenta una gran aspillera para la protección de la entrada, mediante arcabuces. En el lado norte, presenta una garita, un vano a media altura para colocar cañones y una pequeña puerta de acceso.

 

En la cara interior, se observa el camino de ronda que se extiende por el lienzo de muralla y continua en la parte superior de la puerta la que posee una garita. A los lados existen escaleras de acceso al terraplén destinado al acarreo de cañones, el que desemboca en el vano situado a media altura.

 

Esta monumental puerta presenta, del lado exterior, escudos nobiliarios, esculpidos en la piedra, de las principales familias de la villa; además, muestra el estilo plateresco de la arquitectura militar en el siglo XVl.



 

La puerta según expertos, es más decorativa que funcional, sin embargo esta conecta el Alcázar de Diego Colón y la muralla que recorre toda la plaza hasta llegar al final de la calle Las Damas, donde se encuentran la mayor parte de edificios coloniales.


Su estado de conservación es realmente bueno. Se puede atravesar en cualquier momento del día. Los más aventureros podrán incluso subir a la parte más alta gracias a las escaleras y pasarelas que hay en las murallas.


El embarcadero estaba situado cerca de la monumental entrada, por esta penetraban los pasajeros que desembarcaban procedentes de la Metrópoli, la carga de animales y productos destinados a los diversos poblados de la isla y los osados navegantes, exploradores y conquistadores que retornaban a dar cuenta al virrey de sus hallazgos y conquistas.

 

Las recias puertas servían también para colocar edictos y en ocasiones exhibir el cadáver o la cabeza de algún criminal ajusticiado.

 

Al ser la Puerta de San Diego la antigua entrada a la ciudad, en las afueras estaba una plaza donde se podían encontrar frutos y almacenes, esto dio pie a que se arrabalizara.

 

En la década de 1980, la Puerta de San Diego fue restaurada como parte de la construcción de la Avenida del Puerto, dándole la importancia histórica al lugar.

 

 



Así se narra en "El Cristo de la Libertad", la llegada de Juan Pablo Duarte, el 15 de marzo de 1844, a la nueva república independiente, que tanto ayudó a fundar:

 

"El 15 de marzo amaneció agolpada una inmensa multitud en los alrededores de la Puerta de San Diego. Una comisión de la Junta Central Gubernativa bajó al muelle a las siete de la mañana con el objeto de ofrecer al libertador los saludos oficiales. Cuando Duarte puso el pié en tierra, las tropas, alineadas frente al puerto, rindieron honores, y las baterías del Homenaje lo saludaron con los disparos de ordenanza.


El Arzobispo don Tomás  Portes e Infante fue el primero en estrechar entre sus brazos al apóstol y en darle la bienvenida, en nombre del pueblo y de la Iglesia, con las siguientes palabras: 'Salve Padre de la Patria?. El desfile desde el muelle hasta el Palacio de Gobierno se inició en medio de aclamaciones incesantes.


Al pasar la comitiva por la Plaza de Armas, se levantó de improviso un clamor unánime para pedir a la Junta Central Gubernativa que confiriera al prócer el título de General en Jefe de los Ejércitos de la República.

 

Desde el Palacio de Gobierno, en donde la Junta Central le entregó las insignias de General de Brigada, el Padre de la Patria se encaminó, seguido de una muchedumbre frenética, hacia la casa que ocupaba su familia en la calle 'Isabel la Católica'...

 

En el hogar esperaban al Libertador su madre, doña Manuela Diez, y sus hermanas, convertidas desde el amanecer del 27 de febrero en centro de la devoción del pueblo, que veían reflejadas en aquellas mujeres la gloria del recién llegado. El traje negro que vestía la anciana avivó de golpe en la memoria del apóstol el recuerdo del desaparecido.


En medio del júbilo general, del entusiasmo de los viejos discípulos de 'La trinitaria' y de los vivas de las multitudes aglomeradas ante la casa del Padre de la Patria, aquel recuerdo dominaba el ambiente y se sentía flotar en todas partes como un huésped incómodo. Doña Manuela y sus hijas compartían, con más título que nadie, la alegría de la ciudad abanderada. Pero el dolor aún reciente, no les permitía gozar en toda su plenitud del entusiasmo y fervor generales...

 

Aunque el recuerdo de su padre, a quien una muerte prematura no permitió gozar del triunfo de su hijo ni de la independencia de la patria, ennegrecía el pensamiento de Duarte, fue aquél sin duda el único día feliz para este hombre limpio y virtuoso. Fue el único en toda su vida en que se sintió unánimemente querido, y en que fue festejado. El 15 de marzo de 1844 fue también el único día en que tuvo la sensación de haber recibido sobre la frente el beso de la popularidad, y el beso menos cálido pero más duradero de la gloria."

 

Cuenta Rosa Duarte que "a las dos de la tarde notó el General Sánchez que las ventanas de Duarte no tenían banderas; pidió unos velos blancos y él mismo formó con ellos unas banderas que colocó en las ventanas con aplausos de todos, diciendo: 'hoy no hay luto en este casa, no puede haberlo, la Patria está de plácemes, viste de gala, y Don Juan mismo desde el cielo bendice y se goza en tan fausto día".

 

Duarte estaba exiliado en Curazao al momento de la Independencia y fue enviado a buscar en la goleta "Leonor"

  


Dos imágenes de la Puerta de San Diego:


La primera corresponde al año 1899 y la segunda es reciente del año 2018.

 

La mañana del 15 de marzo de 1844, en esta puerta, una multitud frenética, conjuntamente con una comisión de la Junta Central Gubernativa, recibió con los honores de rigor, al padre de la recién creada República, Juan Pablo Duarte y Díez, después de retornar de su exilio. Salve Padre de la Patria!



Dos imágenes de la Puerta de San Diego:


Una de 1916 durante la primera ocupación militar de los E, U., y la otra reciente, de 2019.


En la imagen de 1916 se observa a un grupo de marines entrando a Santo Domingo por la puerta de San Diego, correspondiente a la primera Ocupación Militar Norteamericana de 1916 al 1924.



Esa calle que conectaba desde el puerto de Santo Domingo  a la ciudad, esta era la antigua calle Colón, hoy Las Damas, que desapareció cuando se construyó la Plaza España, limitando la actual calle Las Damas hasta la calle Mercedes. Desde la calle Las Mercedes hasta el puerto es de tránsito peatonal.


Se recuerda que debido a la inestabilidad política en la República Dominicana, que ponía "en riesgo" el pago aduanal a los Estados Unidos, éste país decidió ocupar militarmente a Quisqueya, ocupación que duró 8 años.

 


Dos imágenes de 1939 y 2018, de la Puerta de San Diego:

 

La primera corresponde al año 1939 donde se observa a una gran multitud dándole el recibimiento al dictador Rafael Leónidas Trujillo  por el Puerto de Santo Domingo, sentado en el asiento posterior del primer vehículo, saludando a la multitud.

 

En junio de 1939 Trujillo realizó un viaje a Europa y a los Estados Unidos, donde actuó como Embajador Extraordinario en misión especial con este rango realizó los preparativos para anular los compromisos de las convenciones de 1907 y 1924, y de esta manera lograr que las aduanas del país fueran controladas de nuevo por el Estado Dominicano.

 

Trujillo regresó al país sin lograr anular los compromisos de las convenciones, pero al volver a los Estados Unidos realizó el tratado dominico-estadounidense que firmó junto al Secretario de Estado, Cordell Hull, en diciembre de 1940.


Mediante este acuerdo, Ilamado Trujillo-Hull, quedaron sin efecto las convenciones contraídas con los Estados Unidos, permitiendo más tarde que terminara el país de pagar la deuda que para entonces era de $9, 271,855.55. Esta suma era lo que faltaba por pagar de los $20, 000,000 a que ascendía la deuda externa cuando se inició la Era de Trujillo. Fuente: (circa 1939).


La otra imagen corresponde a la época actual 2018

 


 

Dos imágenes de la puerta de San Diego:


Una corresponde al año 1899 y la otra actual, año 2018.


La histórica y emblemática Puerta de San Diego, también conocida como Puerta de la Mar, en diferentes epocas, desde 1899 hasta el 2018.


En la imagen de 1899 se puede ver el antiguo caserío que había en la cuesta, desaparecido para dar paso a la construcción de la Plaza España.

 

También puede apreciarse las ruinas del Alcázar de Colón antes de ser restaurada en 1957, y el antiguo edificio de aduanas, próximo a la puerta de San Diego.



Dos imágenes de la Puerta de San Diego:


Una de 1908 y la otra de 2019.


Vista  de la "Puerta de San Diego" o "Puerta del Mal" y su entorno en 1908, hoy espacio convertido en Plaza España.


En la imagen de 1908, a diferencia de la actual, se observan las casitas que con el tiempo le fue dando forma a ese caserío, eliminadas más adelante para dar paso a la recuperación de esa zona histórica.




La imagen corresponde al año 1900.


En la misma se observan a carruajes entrando por la Puerta de San Diego, era el tipo de transporte que se usaba en la época 




La imagen corresponde al año 1910.


Aqui se puede observar a un hombre que carga en sus hombros lo que aparenta ser un daguerrotipo, considerado en aquella época como los primeros equipos fotográficos oficiales que se usaban en Santo Domingo.



La imagen corresponde al año 1915.


En esta postal se puede observar la forma elegante como vestía el hombre dominicano usando elegantes trajes.





 Aqui observanmos una imagen de 1923.


En la imagen se puede ver el tipo de tramsporte que se usaba en la época, el caballo jugaba un papel muy importante.





La imagen de la Puerta de San Diego es de 1933.


Esta puerta era la entrada a la ciudad de los visitantes que desembarcaban por el Puerto de Santo Domingo.





La Imagen corresponde al año 1940.




Otra imagen antigua de la puerta de San Diego.




Otra imágen de la Puerta de San Diego.




Imagen de la Puerta de San Diego  en la antiguedad. 





Para el próximo lunes primero de febrero de 2021 publicaré la historia de la Ceiba de Colón, narra la  misma que en el tronco de este árbol Cristóbal Colón amarró sus carabelas cuando llegó a nuestra isla en 1492.








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